jueves, 29 de julio de 2010

Conciliación vida laboral y familiar

Aquí tenéis una noticia que ilustra bastante bien el panorama laboral al que se enfrenta actualmente la mujer en España:

Noticia Federación Española Mujeres Directivas

¿Quién se dedica más al cuidado de los hijos?

Conversación entre dos compañeros de trabajo (uno de ellos acaba de ser padre):

- ¿Qué tal la niña?
- Bien, bien, creciendo muy rápido.
- ¿Os deja dormir?
- Bueno, últimamente anda con los gases y eso. Pero normalmente se levanta mi mujer, que para eso tiene más paciencia.
- Oye, ¿y se piensa coger jornada reducida?

Hasta donde yo sé, la reciente madre tienen un buen puesto en su trabajo, pero de los que están escuchando, a nadie le extrañó la conversación y a nadie se le ocurrió preguntar: “¿Y tú, macho? ¿Vas a pedir reducción de jornada para cuidar de la niña?”

No lo preguntaron por una sencilla razón: porque es algo que no suele ocurrir nunca. Sería una excepción. Y sin embargo, la pregunta que se hizo acerca de la jornada de trabajo de la madre, sí entraba dentro de lo probable.

Contextualizo: se trata de una empresa con aproximadamente 1000 empleados en toda España. Y el 100% ( sí sí, repito: el 100%) de personas con reducción de jornada por cuidado de hijo son mujeres y en muchos casos mujeres con un buen puesto y una brillante carrera profesional por delante. Lo que confirma una realidad como un castillo, que es: que el cuidado de los hijos, en España, lo siguen asumiendo mayoritariamente las mujeres y son las que en la mayor parte de los casos están dispuestas a renunciar a su carrera profesional por ello.

Por tanto, en aquellos casos de divorcios en los que los progenitores no han sido capaces de ponerse de acuerdo y por tanto van a un contencioso, si tenemos claro que la custodia compartida impuesta judicialmente no es la solución porque obligaría a los hijos a vivir en un conflicto permanente: ¿a cuál de los dos progenitores debe atribuirse la custodia? La respuesta parece clara: a aquel progenitor que se haya encargado en mayor medida de su cuidado. Y siendo realistas: ya sabemos quién es en la mayor parte de los casos.

Qué verdades

No dejéis de leer este artículo de opinión. Dice verdades como templos:

Artículo Rosa Pereda

martes, 27 de julio de 2010

Presentación

Nos decidimos a crear este blog ante la nueva corriente pro-custodia compartida (a toda costa) que se está imponiendo y que, a nuestro criterio, atenta gravemente contra la integridad y los derechos del menor. Se está perdiendo el rumbo en esta materia y desgraciadamente va a afectar gravemente a muchos menores que no tienen culpa.

Mucho cuidado: esto que acabo de escribir no quiere decir que pensemos que los hijos tengan que renunciar a uno de los padres o que la custodia compartida no sea en ningún caso la mejor solución. Nada más lejos. Lo que quiere decir es que, cuando se rompe una pareja y ésta es incapaz de llegar a un acuerdo, llegando por tanto a un procedimiento contencioso, en la mayor parte de casos es porque no hay una buena relación entre padre y madre. Para que una custodia compartida sea la mejor medida para el menor, es imprescindible que haya buena comunicación entre las partes y la posibilidad de que puedan llegar a un acuerdo a la hora de tomar las decisiones más básicas que atañen a los hijos. Pero desgraciadamente en muchas ocasiones esto no es posible y por tanto, la educacion y el bienestar de los hijos se ven desgraciadamente perjudicados. Dicho con otras palabras, los hijos se van a ver en medio de una guerra que no tienen por qué sufrir.

Por otro lado, ¡seamos realistas con la sociedad que tenemos! Hoy en día, sigue siendo la madre la que asume mayoritariamente el cuidado de los hijos. Ojo: habrá excepciones y padres que merecidamente puedan llevar el calificativo de "padrazos" y que se impliquen al 50% o más en el cuidado de los hijos, pero tenemos que ser conscientes de lo que tenemos alrededor y analicemos: son una clara minoría. Me indigna enormemente cuando algún padre encendido me comenta: "qué pasa, ¿que nosotros sólo ponemos la semillita pero luego no tenemos derecho a nada? ¿Tenemos que perder a nuestros hijos?" Me indigna porque conozco demasiados casos en que son los hijos los que pierden a los padres: padres que incumplen el régimen de visitas, padres que no pasan la pensión de alimentos (y no porque no puedan o porque sea abusiva), padres que ni siquiera llaman para preguntar por sus hijos...cuando las cifras de estos casos desciendan radicalmente, escucharé a esos padres cabreados. Pero la realidad es que seguimos teniendo una sociedad tremendamente machista en la cuál el cuidado de los hijos sigue recayendo en gran medida sobre las madres: ¿cuál es el porcentaje de madres que piden reducción de jornada para cuidar de los hijos? ¿Y cuál el de padres? ¿Cuál es mayor? ¿Quién está más dispuesto a renunciar a su carrera profesional por sus hijos? Nos queda aún mucho recorrido para que estos porcentajes se igualen.

Por último, todos sabemos lo importante que es la estabilidad para los niños de corta edad: mantener su rutina y su entorno. Y para que, mediante una custodia compartida, esta estabilidad no se vea afectada, es fundamental que exista mucha compenetración y comunicación entre los padres y por supuesto que ambos estén de acuerdo en que esta es la mejor opción para su hijo. Desgraciadamente, con la custodia compartida impuesta por vía judicial, va a haber muchos menores que vean gravemente afectada su estabilidad emocional con las consiguiente consecuencias negativas para su futuro. No podemos permitir esto.

Estamos convencid@s de que esta nueva corriente "pro-custodia compartida a toda costa" (aunque sea también a costa del bienestar del menor) está teniendo tanta fuerza porque también se están mezclando muchos intereses políticos y económicos.

No podemos permitir que esta tendencia progrese, porque está en juego la integridad de nuestros hijos. Por eso os pido vuestro apoyo, ¡no podemos consentir esta locura!

Aviso: no son bienvenidos los comentarios defendiendo la custodia compartida impuesta (obligatoria, preferente o cómo lo queráis llamar). Ya se ha hecho suficiente publicidad en los medios de comunicación en favor de esta medida, sin que se hayan molestado en recoger las cada vez más numerosas opiniones contrarias a esta regulación. Si ell@s pueden, nosotr@s también. ¡Es nuestro momento de luchar y hacernos oír!"